iGuzzini diseña y produce sistemas innovadores de iluminación para interiores y exteriores desde 1959: con el paso de los años se ha ido especializando en particular en el desarrollo de proyectos personalizados para grandes espacios, museos e instituciones. Gracias a estos grandes proyectos y gracias también a una visión vanguardista, la empresa ha sido capaz de investigar e innovar en el campo de la luminotecnia. Hoy en día iGuzzini ha incorporado a su rico catálogo el sistema de soluciones de luz inteligente, formado por elementos que interactúan entre sí de forma automatizada: mediante el protocolo Bluetooth Low Energy o el WiFi, es posible controlar la iluminación directamente desde cualquier teléfono inteligente o tableta. Según la intención de iGuzzini, la luz se hace portátil, lo que agiliza la instalación, programación y gestión del sistema: el sistema puede utilizarse en lugares públicos, en ámbitos de negocios así como en el hogar, desarrollando los servicios disponibles en función de las necesidades del proyecto. La aplicación tiene grandes potencialidades en el ámbito museológico, pero también en el ámbito comercial y en los grandes espacios públicos, como los aeropuertos: gracias a la tecnología de las balizas integradas en el sistema de iluminación y del protocolo Bluetooth Low Energy, es posible recibir información digital. Mediante una aplicación dedicada, el visitante puede recibir información actualizada, vídeos y textos para saber más acerca de la obra que tiene delante, o puede crear su propio recorrido dentro del museo. Por otro lado, la institución tiene acceso a datos sobre los flujos de ocupación de los espacios, lo que le permite optimizar el consumo y los costes, además de desarrollar posibles estrategias promocionales.
iGuzzini: pioneros de la luminotecnia
Desde su fundación en Recanati en 1959, la empresa ha ido creciendo hasta convertirse en un grupo internacional del sector de la iluminación arquitectónica, supervisando proyectos de altísimo nivel. En los años setenta fue la empresa que introdujo en Italia el diseño de la iluminación, que de ser un mero elemento decorativo pasó a convertirse en un elemento técnico e innovador, y fue precisamente iGuzzini la que organizó la primera conferencia italiana para expertos en diseño de la iluminación. El compromiso con la formación en el campo de la luminotecnia prosiguió en la década siguiente, con seminarios y cursos de formación que difundieron la cultura de la luz en el mundo entero. Al mismo tiempo, la empresa puso en marcha los primeros experimentos en el campo de la luz biodinámica, en colaboración con el Troy Lighting Research Center de Nueva York. El primer prototipo experimental de SIVRA (Sistema automático de regulación de la iluminación) se presentó en 1993 en el Museo de Ciencia y Tecnología de Milán. A mediados de los años noventa la empresa llevó a cabo una campaña que se adelantó a sus tiempos: la lucha contra la contaminación lumínica, promoviendo el tema del ahorro energético. En los últimos años, el compromiso de iGuzzini ha continuado gracias a la experiencia del Social Lightscape, un programa bienal de talleres realizado junto a la London School of Economics, el King’s College of London y el Social Light Movement, con el objetivo de incorporar la investigación sociológica al diseño del alumbrado urbano.
iGuzzini en los grandes proyectos arquitectónicos y artísticos
Bruno Gecchelin, Mario Cucinella, Jean-Michel Wilmotte, Michele De Lucchi, Renzo Piano, Dean Skira, Massimiliano y Doriana Fuksas, Gae Aulenti o Jean-Marie Duthilleul no son más que algunos de los grandes nombres con los que iGuzzini ha trabajado a lo largo de estos sesenta años. iGuzzini colabora con arquitectos internacionales en proyectos ambiciosos, cada uno de los cuales ha contribuido a la evolución del sector de la luminotecnia: para iGuzzini, el diseño Made in Italy es una mezcla de investigación formal e innovación tecnológica.
“Nuestro trabajo con los diseñadores y arquitectos está hecho de sinergias, complicidad, intercambio de conocimientos proyectuales e interconexiones. Siempre hemos creído firmemente en esta colaboración, que hoy en día representa nuestro elemento distintivo.”
Si ya en 1987 iGuzzini contribuyó al proyecto de Renzo Piano para el Lingotto de Turín con toda una serie de sistemas de iluminación producidos ad hoc, al cabo de unos 10 años inauguró una temporada de colaboraciones con los museos y, con ella, un programa de promoción y valorización del patrimonio cultural en Italia y en el mundo: lleva la firma de iGuzzini el nuevo sistema de iluminación de la Galería Borghese de Roma, así como las lámparas Le Perroquet de Renzo Piano para el Centre Pompidou de París. En el proyecto de Michele De Lucchi para la plaza del ayuntamiento de Venaria Reale se empleó un sistema de alumbrado de alta precisión, realizado gracias a una distribución óptica innovadora: la farola, llamada La Venaria precisamente por el lugar para el que fue diseñada, consta de una distribución irregular de luces LED con un efecto luminoso muy peculiar. Otro proyecto interesante es el nuevo sistema de iluminación diseñado especialmente para la Última Cena de Leonardo da Vinci, que puede considerarse una auténtica actuación de “restauración perceptiva”, gracias a la cual ha aumentado el número de visitantes que pueden acceder al mismo tiempo y disfrutar así de esta inestimable obra de arte con la luz adecuada.
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