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Las decoraciones para la casa nos permiten personalizar al máximo nuestros ambientes, con una atención especial hacia los detalles. De la misma manera que para la elección de los muebles es fundamental su funcionalidad, en el caso de las decoraciones, la decisión dependerá en gran medida del gusto personal y del diseño de los otros complementos de decoración. Entre los objetos de decoración más comunes encontramos las alfombras, espejos, vinilos decorativos, velas, objetos decorativos, floreros y cuadros.
Los objetos decorativos tienen la capacidad de marcar la diferencia en el efecto final del proyecto de decoración de una casa. Además, a través de las decoraciones, es posible cambiar con facilidad el aspecto de una estancia y pasar, con pocos elementos, de un estilo a otro. Pero los elementos decorativos no solo tienen una función estética, sino que pueden influir en el proyecto de diseño general. Por ejemplo, un espejo de pared, además de decorar, hará que una estancia pequeña parezca más espaciosa, mientras que los estantes ofrecen la posibilidad de aprovechar los rincones más difíciles de decorar e, incluso, pueden sustituir a las librerías y muebles de almacenaje, con un resultado más ligero. Sin embargo, es muy importante dosificar el uso de elementos como los floreros y los objetos decorativos, para garantizar un equilibrio estético en la decoración. Para esto, una buena solución sería la creación de conjuntos pequeños de objetos donde se mezclen materiales, alturas y proveniencias. Por ejemplo, se puede crear un conjunto formado por un souvenir de viaje y elementos decorativos más lineales y minimalistas, con colores combinados. Esto hará que el souvenir se integre mejor en el espacio y dialogue con los otros objetos.
Los textiles y alfombras son esenciales para el éxito de un proyecto de decoración. Desde las sábanas para la cama, hasta los manteles, los revestimientos para sofás y cojines, cada elemento contribuirá al efecto decorativo final. Aquí podemos atrevernos con los colores y aprender a combinarlos para crear incluso juegos insólitos, pero con carácter. Y si preferimos una atmósfera más sobria, podemos decidirnos por los tonos a juego con otros elementos de decoración, para crear un efecto más homogéneo. Las cortinas y persianas también son fundamentales para la obtención del resultado de decoración final, y su elección, a menudo, suele ser difícil.
Entre los complementos de decoración más populares, encontramos los cuadros y pósteres que decoran y personalizan las paredes con combinaciones y composiciones de gran impacto visual. Decidir la disposición de los cuadros en las paredes suele ser fácil y divertido, aunque también se necesita mucha precisión, sobre todo si se quiere colocar los marcos perfectamente alineados. En cambio, si se prefiere una composición más variada, no es necesario estudiar la posición exacta de los cuadros que, además, se podrán alternar con láminas, objetos pequeños, estantes y espejos, con los que se obtiene una sensación de movimiento armónico en la pared. Otro de los elementos decorativos capaces de cambiar el aspecto de todo un ambiente es, sin duda, el papel pintado, que ha vuelto a ponerse de moda en los últimos tiempos, junto a los vinilos decorativos, que representan una solución más temporal y ligera, pues se realizan con colas que permiten que se despeguen con facilidad.
Pero los complementos de decoración también son esenciales a la hora de dividir y organizar el espacio. A cada estancia corresponde su complemento de decoración. Solo por mencionar algunos, tenemos percheros y paragüeros para el recibidor, revisteros y sujetalibros para el salón, galán de noche y perchas para el dormitorio. Las posibilidades de decoración, si contamos con los elementos adecuados, son infinitas y nos
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